En los últimos años he identificado en las empresas dos temores respecto a la Transformación Digital. La primera es la supuesta destrucción de empleos, y la segunda que es el tema de este blog es el supuesto de la alta inversión que representa este cambio en las industrias.

Según el MIT para el 2022 las empresas habrán gastado 1.4 trillones de dólares en proyectos sin ejecución exitosa, y Forbes dice que el 84% de los proyectos de Transformación Digital fracasan.

Cuando analizamos algunos de los estudios que respaldan estos datos dentro de las variables que llevan a estas fallas están:

1. La falta de alineación a un objetivo;
2. Resistencia de la cultura;
3. Falta de entendimiento del valor del uso de la tecnología;
4. Impacto de la tecnología en los clientes.

Las cuatro representan un escenario ideal para detonar proyectos ágiles que den resultado y que permitan ganar credibilidad, y lo primero que debemos hacer es definir la metodología que vamos a usar como medio de ejecución.

¿Por qué creo que Design Sprint en la correcta?

Cuando reviso la estructura del proceso de Design Sprint, sus etapas y que entrega en cada una de ellas, llego a la conclusión de que esta metodología puede resolver esas fallas.

Google diseñó el proceso para poder experimentar en un entorno controlado y de bajo costo todas las ideas externas e internas que tienen potencial para integrarse a su propuesta de valor.

Design Sprint integra lo mejor de las metodologías de innovación como Design Thinking y Lean Startup, y sus resultados han hecho que empresas como LEGO, IKEA, Google la usen como su metodología oficial.

¿Cómo resuelve las 4 fallas de la transformación digital?

Falla #1 Falta de alineación a un objetivo.

El poder de la metodología se basa en que parte por identificar un reto de negocio específico que se debe resolver en el sprint con lo cual podemos definir cuál es el reto de la Transformación Digital.

En la mayoría de las empresas las áreas operativas dan por un hecho que la tecnología se tiene que implementar sin saber qué valor va a generar realmente al negocio.

Falla #2 Resistencia de la cultura.

El segundo elemento clave de Sprint es que la etapa inicial del proceso se concentra en entrevistar a los expertos de la problemática o reto que queremos resolver con lo cual podemos tener visibilidad de donde debe enfocarse la transformación o donde pudiera crear mayor valor.

Luego en la generación de posibilidades se convierten los problemas identificados en las conversaciones con expertos para convertirlos en oportunidades de ejecución, en las primeras ideas que luego se convertirán en un sketch.

Otro elemento poderoso de la metodología es la convergencia de las ideas a través de la votación del equipo del Sprint. Esto obliga a los participantes a escoger donde está el mayor potencial e impacto de la digitalización. Identificando los patrones las personas tendrán discusiones de fondo dado que dependen de hacer una muy buena votación con base en su conocimiento.

Falla #3 Falta de entendimiento del valor de la tecnología.

Ya en la etapa de desarrollo del prototipo es clave hacer el “journey” del usuario para poder encajar la idea que se va a diseñar en un contexto que permita validar su funcionalidad y también alinear y depurar cualquier duda que tenga el equipo.

El prototipo debe cumplir una serie de características para que el usuario puede entender lo que el equipo del sprint está queriendo crear y ver si les es útil o si resuelve alguna necesidad insatisfecha que hoy tienen.

Falla #4 Impacto de la tecnología en los clientes.

La validación iterativa con los usuarios se debe enfocar en contestar las hipótesis más importantes del equipo del sprint para poder pulir la idea, al final el prototipo es la materialización de esa idea para poder confirmar los supuestos de diseño especialmente a nivel de experiencia de usuario (UX) pero también de interacciones del mismo (UI)